Las comunidades religiosas femeninas de clausura, instaladas en Toledo, son titulares de un patrimonio histórico y artístico extenso y de un extraordinario valor. El empobrecimiento paulatino junto con el descenso de las vocaciones religiosas han mermado su capacidad para poner en marcha nuevas iniciativas que paliasen su difícil situación económica, lo que ha llevado en estos últimos años al cierre de algunos de ellos. Conscientes de su precaria situación, la Fundación dede sus inicios ha dedicado una especial atención a los conventos y para ello elaboró un Plan dirigido especialmente a conseguir una mejor calidad de vida para las religiosas.

Se han desarrollado múltiples actividades a tal fin: cursos de formación para la conservación preventiva de su patrimonio, proyectos de digitalización de los archivos, cursos de informática, asesoramiento en la actualización de los contratos de arrendamiento, acondicionamiento de las salas de labor, reinstalaciones eléctricas y de calefacción, equipamiento y mantenimiento informático, limpieza de las dependencias, mantenimiento de los huertos, entre otras.

Obras de acondicionamiento en los Conventos de clausura:

-Celdas, Convento de San Pablo, 1991.

-Claustro de los Laureles, Convento de Santa Isabel, 1992.

-Pintura, iluminación e instalación eléctrica de la iglesia, Convento de Santa Clara, 1992.

-Iluminación de la iglesia del Convento de San Pablo, 1995.

-Pintura e iluminación de la iglesia, Convento de las Gaitanas, 1995

-Sala de recreo, Convento de las Gaitanas, 1995.

-Pintura e Iluminación de la iglesia, Convento de San Clemente, 1996-1997.

-Sala de labor y rehabilitación de distintas dependencias, Convento de San Pablo, 1997. Proyecto Ana Peña; ejecución de la Escuela Taller Judería Mayor; Junta de Comunidades e INEM.

-Equipamiento informatico en varios conventos, 2001-2003.

-Cocina, Convento de Las Carmelitas Descalzas, 2003.