A cargo de Manuel de Castro. 2011.
El llamado cambio climático ya no es un asunto debatible, al menos en el ámbito del conocimiento científico. Se trata de un fenómeno observable a escala global que afecta en diversa medida a todos los lugares del mundo y que inequívocamente es atribuible a actividades humanas. De estos temas y su repercusión en la ciudad de Toledo, nos hablará Manuel de Castro, Catedrático de Física de la Atmósfera de la Universidad de Castilla La Mancha y miembro del Panel Intergubernamental de expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) auspiciado por la ONU.
Lunes 23 de mayo, 19.30 h.
Conferencia Toledo ante el cambio climático: Escenarios posibles
Las observaciones meteorológicas en la ciudad de Toledo durante los últimos 90 años atestiguan unos cambios climáticos relacionados esencialmente con el calentamiento planetario registrado en el último siglo. Por tanto, es razonable deducir que los escenarios globales de clima proyectados para el presente siglo van a determinar la evolución de sus condiciones climáticas urbanas, intensificando la actual tendencia a lo largo de las próximas décadas. Además, hay pocas dudas de que este fenómeno producirá particulares impactos socio-económicos.
Jueves 26 de mayo, 19.30 h
Toledo ante el cambio climático: Propuestas de futuro para una ciudad con pasado
Los impactos directos o indirectos del cambio climático sobre las zonas urbanas y las posibles estrategias para paliar sus potenciales efectos son asuntos que han cobrado una especial relevancia. Pero los riesgos asociados con el cambio climático previsible difieren según las ciudades. Esto obliga a realizar análisis particularizados sobre la vulnerabilidad de cada una ellas e identificar los riesgos en sus planes de desarrollo socio-económico, antes de tomar en consideración las estrategias de adaptación más adecuadas. En esta charla se presenta el esbozo de una posible actuación dirigida a paliar alguno de los impactos más evidentes asociados al calentamiento global en el entorno histórico de Toledo, una ciudad Patrimonio de la Humanidad y foco de atracción turística mundial. Las particulares características de su trazado urbano ofrecen una oportunidad única para implantar un sistema viable capaz de moderar los rigores climáticos estivales que recurrentemente padece, ante la perspectiva inequívoca de su intensificación. Además de sus evidentes beneficios, permitiría emprender un proyecto que muestre el potencial técnico e innovador de una antigua ciudad con voluntad de adaptación a los tiempos futuros.