Esta cámara está conectada y accesible a todo el mundo permanentemente, las veinticuatro horas del día, todos los días del año. Pretende ser un humilde y sencillo, pero eficaz, observatorio permanente del estado del río Tajo en la ciudad de Toledo. Enfocada al icónico Puente de San Martín, emblema de nuestro logotipo, registrará el aspecto del maltratado río de manera constante para que cualquier habitante del planeta pueda ver en tiempo real el color de sus aguas, la presencia o ausencia de espumas y su caudal, estimado en base a la altura de la lámina de agua sobre referencias fijas como son los sillares del propio puente, rocas de la orilla o el azud.
De este modo, nuestra sede de la Roca Tarpeya -histórico mirador sobre el Tajo del que se enamoró el escultor Victorio Macho hasta convertirlo en su casa y taller- será testigo del cumplimiento o incumplimiento de los caudales ecológicos del Tajo, de la recuperación o no de la calidad de sus aguas y -esperamos- del proceso de reintegración del río dentro de dinámicas naturales razonables como elemento esencial del paisaje cultural de Toledo.